Para germinar semillas, puedes seguir estos pasos:

Prepara los materiales: Necesitarás semillas de buena calidad, servilletas de papel, agua sin cloro, y un plato o recipiente poco profundo.

 

Humedece las servilletas de papel: Humedece dos o tres servilletas de papel con agua, asegurándote de que estén húmedas pero no empapadas.

Coloca las semillas: Coloca las semillas sobre una de las servilletas de papel húmedas, dejando un pequeño espacio entre ellas.

Cubre las semillas: Cubre las semillas con las servilletas de papel húmedas restantes.

Crea un ambiente oscuro y húmedo: Coloca las servilletas de papel con las semillas en el plato o recipiente. Cubre el plato con otro plato o un envoltorio de plástico para crear un ambiente oscuro y húmedo.

Mantén la humedad y la temperatura: Guarda el plato en un lugar cálido y oscuro, con una temperatura ideal entre 21°C y 27°C (70°F y 80°F). Revisa las servilletas de papel diariamente para asegurarte de que permanezcan húmedas, rociándolas con agua si es necesario.

Espera a la germinación: En unos pocos días, las semillas deberían germinar y mostrar una pequeña raíz blanca (radícula).

Planta las plántulas: Una vez que la radícula tenga aproximadamente 1-2 cm de largo, planta cuidadosamente la semilla en un medio de cultivo adecuado, con la radícula hacia abajo.

¡Mucha suerte con tu cultivo!